Los éxitos comprobables dependen de la enfermedad fundamental y su causa. Se conocen, entre otros, más de cinco millones (!) de casos de pacientes tratados exitosamente en Moscú. Numerosos estudios casuísticos constatan que también a pacientes, a los cuales se les habían aplicado otras terapias sin un éxito comprobable, pudieron ser tratados con éxito con este método. Desarrollos progresivos de determinadas enfermedades llegaron a detenerse, en otros casos se llegó incluso a la curación completa. Entre ellos hubo casos de esclerosis múltiple, colitis ulcerosa, enfermedad de Crohn, enfermedades reumáticas, enfermedades cardíacas (degenerativas o causadas por el síndrome coronario agudo), etc. En pacientes crónicos, la tasa de respuesta es de aproximadamente un 80%, la tasa de curación, de aproximadamente un 60%.
Independientemente de las observaciones de casos, se demostraron científicamente las bases físicas en 1996 por un estudio en el Instituto de Física Atómica de la Universidad de Viena (Prof. H. Klima).
De cuando en cuando aparecen escépticos que ofrecen “pruebas” de la inutilidad de la BIT. Todos estos estudios refieren graves fallos en el diseño y el procedimiento y podrían ser desechados en el capítulo “manipulación de la opinión mediante información erróneamente dirigida”. |
