Para un diagnóstico preciso, se realizan exámenes de funcionamiento adicionales que informan sobre la situación energética y la capacidad de regulación del organismo. Más allá del diagnóstico de la medicina estándar que, preponderantemente, maneja exámenes estadísticos y no considera con la suficiente atención los procesos dinámico-funcionales del organismo, en la BIT se elabora un diagnóstico siguiendo los siguientes cuatro puntos:
- Síntoma guía
- Constitución
- Carga de estrés crónico
- Disparador
El síntoma guía se corresponde con el diagnóstico de la medicina estándar y sirve para graduar el efecto terapéutico. Esto es, en este primer paso, el paciente no es aún tratado, sino sometido a análisis.
La constitución da indicaciones esenciales acerca de la tendencia a padecer determinadas enfermedades y sobre el proceso curativo esperado.
Con el concepto de estrés crónico se atiende a la carga completa del organismo sometido a estrés emocional, toxinas ambientales, vacunaciones, infecciones virales o bacterianas no del todo sanadas, focos crónicos de inflamación, etc. |